La desratización en Madrid es uno de los controles de plagas más recomendables desde el punto de vista de la salud pública que se pueden realizar. Los ratones y ratas son un factor de riesgo para las personas, no sólo por las enfermedades que estos animales pueden transmitir en el hombre, sino por los parásitos de los que son portadores y que pueden llegar al hombre de forma indirecta.

En AMELIN luchamos contra, posiblemente, la plaga de mayor importancia que han sufrido todas las ciudades del mundo alguna vez en su historia. Afortunadamente, en pleno siglo XXI, en España son cada vez menos frecuentes la presencia de estos molestos roedores en ciudades con un nivel adecuado de limpieza y salubridad. Pero, en condiciones anormales de huelgas de recogida de basuras, frecuentes en los últimos tiempos, pueden formarse de nuevo estas plagas urbanas. Además, son unos tipos de animales que se adaptan al entorno en el que viven y que son capaces de inmunizarse a productos y tácticas que llevan a cabos los humanos para acabar con ellos.

Habitualmente existen dos métodos de desratización en Madrid. Por un lado está el método pasivo, más orientado a la prevención, con el fin de variar las condiciones ambientales del lugar, mientras que el método activo implica la utilización de medios físicos, químicos y biológicos para controlar la población de roedores de un lugar. En este sentido, el principal método son los cebos rodenticidas o raticidas, a elegir en función de la especie y los hábitos alimenticios que tengan los roedores que queramos controlar, con el fin de mantener unas condiciones aceptables de higiene y salud.